Algo en mi había cambiado. Si bien seguía amando a Franco con la misma intensidad de siempre, pero algo en mi se quebró y era definitivo. No tenia solución. Y me gustaba, me sentía bien, estaba decidido a relajarme y pasarla bien, así para la próxima no me afectaría tanto (si es que la hay). Y es lo que haré hoy. Todo indica que hoy sera un gran día mientras pedaleo camino al cumpleaños de la hija de mi amiga Anto. El sol brilla en el cielo junto a hermosas nubes blancas como la nieve y un viento cálido ideal para celebrar el cumpleaños de un niño. Los veinte minutos de pedaleo se me hicieron cortos escuchando música. Al llegar a la casa llamo por celular a la Anto para que me salga a buscar. El cumpleaños sera en la casa de la hermana de la Anto, una casa junto a un galpón enorme con maquinarias de construcción. Llegue antes para ayudarle en lo que necesitara. Entramos al lugar, saludo a todos. Johanna la hermana de la Anto, Miguel su cuñado, Andres el esposo de mi amiga y unas cuantas primas y tías de la familia, conozco a todos. La Anto me explica lo que quiere hacer y ambos comenzamos imaginar como quedaría mejor todo. Decidimos cubrir el lugar con telas blancas que habían comprado. De extremo a extremo formando "paredes" y así dejar cubierta las maquinarias. Y de ahí comenzamos a adornar tirando cintas de papel crepe color violeta, blanco y globos con los mismos colores. Quedo muy lindo todo, al terminar nos sentamos y la Anto me ofreció la infaltable cerveza.
-Va a venir el Jano- dijo levantando las cejas y mirándome fijamente.
-¿El Jano?- pregunte extrañado bebiendo un sorbo de cerveza.
-Si el Jano.
-¿Pero porque?, si se supone que ustedes antes se comían y el Andres es tu esposo y ...
-Si pero ya no po, aparte el Andres lo conoce y no tiene idea así que lo invite... Mas regalos para mi princesa.
-Que eres interesada Anto.
-¡Ah weon si es broma!. Si es pa' que carretiemos también.
-¡Ah!, ¡Te digo altiro!... No me quedare a carretear- dije apuntándola con el dedo indice.
-¿Porque?- pregunto extrañada.
-Porque yo vine al cumpleaños de tu hija, no a carretear. Aparte mira como ando vestido, con short, a la noche me voy a cagar de frió.
-¡Ha no seaí chato po weon!
-¡No, no, no!. Aparte estoy conduciendo- dije sonriendo mientras bebía otro sorbo de cerveza.
-Pero te quedai aca po, ya no te pongai weon... ¡Vamos hacer karaoke!- dijo levantando las cejas tratando de convencerme ¡Maldita! Sabe que me encanta el karaoke. Rió a carcajadas al verme dudando.
-¡Ya, ya!... Bueno, pero cuando termine el cumple de la Anahi me voy a cambiar a mi casa y después me vengo en un taxi.
-Pero te devolví si culiao, si no me voy a enojar con voh.
-Si weona dura. Si ya me entusiasme con el karaoke.
-Si va hacer la raja, a todo chancho... Voy a conectar mi tablet al equipo de mi hermana y el equipó al led... Quiero que cantemos "Where are you been " de la Rihanna y hagamos la coreografía- ¡¿Que?!
-¡Anto estay loca!.
-¡Yapo!. Como cuando la bailábamos en mi depa curaos.
-¡Anto estábamos curados!- dije bebiéndome la botella de cerveza al seco.
-¡Yapo!... Seguro a la noche no nos vamos a curar naah. Pasa pa' aca- dijo quitándome el envase de cerveza vació -Voy a buscarte otra.
-¡Y te apuras por favor!- dije con ademan de señor adinerado. Ella voltio y me enseño su dedo medio.
Me quede ahí mirando el lugar y escuchando a las primas de la Anto tirar la talla, mire la hora. Se supone que ya deberían estar llegando los demás invitados. En el fondo estaba impaciente, quería que llegaran pronto para verlo y estar con él. Hasta que golpearon el portón de la casa escandalosamente gritando "¡Abran la puerta!". Me gire para reconocer la voz. "Es el weon del Andy" dijo una de las tías y se paro para ir a abrir el portón. ¿El Andy? ¡Conchesumadre! ¡El Andy!. Grite para mis adentros. Me pare rápidamente y camine hacia la casa buscando a la Anto, la encontré en la cocina hablando con su hermana.
-Shiiiii demorate mas- dije apenas la vi.
-Toma- dijo entregándome la cerveza - Ya vamos para afuera que están llegando.
-Si, yo voy a pasar al baño y salgo- dije buscando una excusa para no ver al Andy.
-Ya te espero afuera.
Entre al baño, me encerré y me quede ahí sentado haciendo nada. Me daba vergüenza mostrarme ante él sabiendo que sabia lo mio con Franco. Pero no pasaron ni cinco minutos y alguien golpeo la puerta.
-¡Borja abre... Soy el Franco!- pidió a susurros. Me levante rápidamente y abrí. Entro, cerro la puerta, me agarro la cara con sus manos y nos besamos -Hola- dijo sonriendo.
-Hola- respondí medio descolocado por el efusivo beso -¿Franco y la Cati?.
-No vino- respondió como si nada.
-¿Que?, ¿Porque?.
-Dijo que no se sentía bien y que le dolía la cabeza. Si no quería que viniera, pero vine igual y traje a la niña... Me vine con el Andy- ¿Y nuestra conversación?.
-Ya salgamos.
-Nopo... Que'emonoh ratito aca- dijo abrazándome y besándome el cuello. Eso me volvía loco, pero no.
-No Franco nos pueden pillar.
-Yapo... ¿Y como en la casa de loh abueloh?.
-Esa vez fue distinto, era tu cumple.. Ya salgamos.
-¡Espera, espera!. Tome, guardarme esta plata- metió su mano al bolsillo y saco un fajo de billetes de veinte mil.
-¿Y esa plata? pregunte extrañado sin recibir el dinero aun.
-Es del Andy, me pidió que se la guardara, pero yo soy medio pa'o y se me puede caer... Y como confió en usted, prefiero que usted la tenga po- recibí el dinero sin querer hacer mas preguntas. Sentía como si fuera algo tranfugo.
-Ya vamos para afuera- guarde la plata en mi banano.
-¡Besito, besito primero!- nos besamos una vez mas y salimos al patio.
Al salir al patio salude al Andy y a sus dos hijos. Fue inevitable no sonreír con complicidad al verlo, después de eso me relaje y ayude a la Anto en todo en el cumpleaños, serví torta, bebida, mas torta y mas bebida para cada niño y adulto que pedía. La Javi y a la Anahi demostraban ante los demás niños con orgullo que yo era su amigo y los demás niños me miraban con curiosidad buscando algo de simpatía en mi. Y ahí yo ponía mi tono mas animoso y alegre para hablarles y les sonreía con naturalidad. En momentos miraba al Franco que me miraba igual que los niños tratando de entender mi paciencia.
Solo cuando llego el momento de la piñata y que la Anahi abriera los regalos, solo ahí pude sentarme, volver a tomar una botella de cerveza y estar al lado de Franco.
-¿Borja?- dijo curioso mientras todos estaba pendientes de los regalos.
-¿Franco?- respondí de la misma manera.
-¿Te hubiera gustado tener hijos?.
-Si- respondí sonriendo -Me hubiese encantado tener un hijo.
-¿Y si tenemos un hijo?- me miro con un brillo de una posible realidad en sus ojos.
-Jajaja, tonto. Si se pudiera...
-Me gustaría tener una hija tuya, una morenita chica con tu piel, tus labios, tus ojos- dijo pronunciando bien las eses. La piel se me erizo.
-Seria lindo ¿Verdad?. A mi me gustaría tener un Franquito chico, con tu piel clara, con tus rizos pequeños, tu altura, tus ojos achinados.
-¿Que nombre le pondría?
-Hmmmm... Franco Andres- sonrió orgullo al escuchar.
-Mi primer nombre y tu segundo nombre, suena lindo.
-Tu nombre y el nombre de mi padre, los hombres que mas... He amado.
-Te amo Borja.
-Yo también Franco- el momento era para besarnos, pero obviamente no se podía. Unos segundos de mirada cómplice y mi celular comienza a vibrar. Lo saque de mi banano y veo que era una llamada de la Cati.
-¿La Cati?- pregunto él extrañado, levanté los hombros y conteste.
-¿Cati?.
-Borja le podi decir al Franco que conteste su caga de celular.
-Ok, yo le digo.
-Me puedes abrir el porton porfa... Estoy afuera.
-¿Estay aca afuera?.
-Si ven a abrir.
-Ya dale- corte la llamada -Esta aca afuera- avise al Franco.
-¡Oh la mujer ataosa!- dijo con cara de desagrado mientras me paraba a abrir el portón. Al llegar allá la salude lo mas animoso que pude, pero ella estaba demasiado desanimada.
-¿Donde puedo comprar cigarros acá?- pregunto molesta sin entrar aun.
-Acá atrás hay una botilleria- dije ya que conocía algo el lugar por algunas veces que carreteamos con la Anto ahí.
-¿Acompáñame?- pregunto seria. Por dentro puse los ojos en blanco y la maldije. ¿A que mierda viene a webiar si no quería venir?.
-Ya vamos- caminamos unos pasos en silencio -¡Cati anímate por favor!, ¡diviértete un poco!- dije tomándola de los hombros.
-Si vine con esa intención, pero no se, tu sabí que no me gusta carretear y menos con la familia del Franco, son todos buenos pal copete.
-Si pero que de vez en cuando es bueno pasarla bien po.
-Ya si... Te voy hacer caso. ¡Me voy a tomar todas las micheladas que pueda y la voy a pasar la raja!- dijo cambiando repentinamente de animo.
-¡Esa es la actitud!- me acorde de nuestra conversación -¡¿Oye que onda?!... ¿Estay o no embarazada?.
-Naah- dijo haciendo un gesto con la mano -Es mentira- por dentro salte de la felicidad.
-¿En serio?- pregunte ingenuo aun sin creerlo.
-Era mentira pa' que este otro se asustara porque estoy segura que me esta cagando, dijo que no pero no le creo... ¿No te ha dicho nada?.
-¡Oh Cati que eri zorra!- no podía creer que haya echo eso. Pero era eso mejor que lo otro. Rió culpable.
-¿Pero no te ha dicho nada?.
-No... osea me comento que tú creías que él te estaba cagando, pero que no es así. Tú cachai como es el Franco po, hablamos como de otras cosas.
-Si... Se hace el weon- reí.
-¿Cati y si te estay pasando puros rollos?.
-Si, no se, filo, me quiero relajar ahora.
Al caminar de vuelta a la casa, grande fue la sorpresa al encontrarme con el auto azul metálico del Jano. "El auto del Jano" dije en voz alta sin importar que la Cati entendiera.
-¿Que?- pregunto.
-Ese auto azul es del Jano... Un amigo de la Anto.
-¿Con el que fueron a las carreras la otra vez?.
-Si... Él.
-¡Uy!, ¡Se te ilumino la cara- dijo con tono gracioso burlándose -¿Te gusta?.
-Naah que ver- respondí sonriendo.
-¡Si!... ¡Te gusta, te gusta!, mira como te pusiste.
-Cati no me gusta, me cae bien, es super... Simpático- continué diciendo entre risas.
-Hmmm- dijo con tono de gozo -¿Y como es?, ¿Es rico?.
-Si, es guapo... Osea yo lo encuentro guapo.
-¡Yaaaa!, ¡Entonces te gusta!... Lo reconociste- ¡que dura!. Pero no era mala idea darle a entender eso, así la despisto de cualquier cosa.
-¡Si ya si!. Pero cero posibilidad porque es hetero- dije haciéndome el afligido por eso.
-¡Curalo raja y te aprovechai de él no mas!.
-Jajaja tonta... Ya entremos.
El cumpleaños ya se había terminado. De fondo se escuchaba reggaeton y todo indicaba que "la Fiesta de los grandes" ya había comenzado. La Cati saludo a todos cinicamente demostrando alegría al verlos. Yo camine detrás de ella esperando ver el momento en que saludara al Franco y si es que lo hacia. Pero frente a mi se cruzo el Jano con una sonrisa estampada en la cara y con los brazos abiertos para abrazarme.
-¡Borja!- dijo feliz.
-¡Hola Jano!- y una vez mas me abrazo sin darme tiempo de tenderle mi mano.
-¡¿Como estay Borjita?- me beso en la mejilla como si fuera lo mas natural.
-¡Bien... Bien!. Como siempre- dije algo incomodo por el beso -¿Y tu Jano?.
-¡Bien igual!... Super bien la verdad.
-Que bueno- dije mirando alrededor. Franco nos miraba fijamente, se paro y camino hacia nosotros.
-Buena, buena- dijo entregandome mi cerveza.
-¿Se conocieron?, ¿Se saludaron?- pregunte a ambos. Franco negó con la cabeza serio.
-No, no... Trate de saludar a todos pero era mucha gente, así que salude en general- respondió el Jano.
-Bueno... Franco él es Jano, el amigo de la Anto. Jano, él es Franco, es el primo de la Anto- se saludaron de mano diciendo "buena hermano" -¡Cati ven!- se acerco hacia nosotros -Cati él es el Jano.
-Hola Jano- dijo poniendo su mejilla para saludarlo.
-Hola- respondió él.
-Asi que este es el Jano de las carreras- Jano rió.
-El Franco y la Cati son pareja hace como... ¿Ocho años?- dije mirando a ambos, dando información extra. Ambos asintieron.
-Si casi nueves años ya- respondió la Cati. Y justo se acerca la Anto.
-¿Se conocieron ya?- nos pregunto. Todos respondimos que si -Ya bacan- ¡Oye y vo maricon!- dijo dirigiéndose a mi. Todos rieron menos el Franco -¿Te vai a ir a cambiar o no?.
-Si voy a ir- poniendo los ojos en blanco -De echo iba a ir ahora.
-Amigo ¿Pero porque te vai a ir?- pregunto la Cati.
.Porque voy a ir a cambiarme de ropa po, mira como ando, no quiero congelarme a la noche.
-¿Si querí te puedo acompañar Borja?- dijo amablemente el Jano.
-Gracias Jano pero ando en la bici- no mire en ningún momento al Franco, no se porque algo me decía que estaba celoso y me lo demostraba con su silencio. Como si estuviera estudiando mi relación con el Jano.
-¡Pero si queri lo vai a buscar Jano!. Porque a lo mejor no vuelve, denante dijo que no queria- dijo la Anto acusandome.
-¡Si quiero dura! Si ya me convenciste con el karaoke.
-Si pero porsiacaso. ¿Jano podi?- dijo ella demostrando autoridad.
-¡Si, si!. No tengo atao- respondió él tranquilo.
-Gracias pero no- dije mirando a la Anto serio -Jano no te preocupes, vaí a puro gastar bencina. De vuelta me vengo en un taxi no mas.
- Si no tengo drama Borja en serio- dijo insistiendo.
-Ya si no quiere- dijo la Cati apoyándome.
-Gracias Cati... Ya, voy y vuelvo... en 40 minutos mas vuelvo- mire a todos como despidiéndome.
Al llegar a mi casa me ducho rápidamente una vez mas y cuando estoy listo tomo mi celular para pedir un taxi. Revise antes el mensaje de whatsapp que me había enviado la Anto: "El jano va en camino a buscarte maricon ataoso, apúrate!" Sonreí por lo insistente que es mi querida amiga y le respondí de la misma forma: "¡Que dura la putaaaa!". Mire la hora del mensaje, había sido enviado hace diez minutos. Osea que el Jano debería estar acá o debería estar por llegar. Mire por la ventana y en efecto ahí estaba estacionado el auto del Jano frente a mi casa. Escuche el sonido del timbre, me apresure en arreglarme, recordé la plata que el Franco me había pasado, me la guarde y baje. Me sorprendí mucho al verlo subiendo la escalera.
-¡¿Franco?!- dije sonriendo.
-¡Si!, ¿Porque?- pregunto él entre serio y sonriendo. Y ahí en la escalera del segundo piso me beso.
-¿Y el Jano?- pregunte después del beso.
-¿Porque?, ¿Lo querí ver a él?- dijo demostrando sus celos.
-Tonto... Es por si nos ve.
-Ojala sea por eso no mah.
-Ya celosito... ¿Porque se pone tan celoso?- dije apretándole la mejilla izquierda como a un bebé.
-Porque si- respondió como un niño -Se puso muy feliz cuando te vio.
-Porque le caigo bien po amor, tu mismo dijiste la otra vez que le caigo bien a todos, que soy querible. ¿Y ahora donde esta?.
-Esta abajo esperando.
-¿Bajemos?...- asintió -Te quiero- dije besándolo fuertemente antes de irnos.
En el camino de vuelta me senté atrás. Ellos dos iban conversando de marcas de autos y sus velocidades. Yo no entendía nada, su conversación era como las matemáticas para mi.
Cuando llegamos se escucha a la distancia los zumbidos de la música. Era cumbia, escuchaban al grupo "Amar azul" y no se porque me sentí emocionado, con ganas de entrar y bailar. Nos bajamos del auto y Franco me miro con cara de interrogación, a lo mejor estaba demostrando mucho las ganas de querer pasarla bien. Entramos y la Anto parecía estar esperándonos, me tomo de la mano y me llevo a bailar. Mientras bailábamos, un vaso de cerveza llego a mis manos gracias al Franco, le agradecí con la mirada y seguí bailando para no parar en bastante rato. Vaso tras vaso, regaetoon, cumbia, bachata y hasta axé bailé. Y mientras avanzaba la noche... Pude notar la ausencia del Franco junto a su primo Andy varias veces y cada vez lo notaba mas extraño. Y por mas que quise pasarlo por alto no pude. Le dije a la Anto que iba al baño para que siguiera bailando con el Jano ya que estábamos bailando los tres. Camine hasta donde se encontraba el franco con su primo, ambos de pie con una cerveza en la mano mirando como todos se divertían.
-¡Vayan a bailar po!- dije animado -Parecen estatuas ahi parados- el Andy sonrió y Franco negó con la cabeza seriamente.
-Naah- respondo él sin mirarme aun -Anda a bailar tu po, si se nota que la estay pasando bien- note su forma de hablar y expresarse... definitivamente había algo extraño.
-¿Andy?... ¿Me dejai hablar con el Franco porfa?.
-¡Si!... Dale, voy a mear y buscar otra chela- respondió mientras se alejaba.
-¿Franco?... ¿Donde andabai?- pregunte serio.
-¿Por que?. respondió y sin mirarme aun. Mi corazón comenzó a latir rápidamente al sospechar lo que no quería.
-Porque ví que saliste varias veces con el Andy ¿Donde fuiste?.
-¡Fuimos a comprar cigarros oh!.
-¿Fueron a comprar cigarros tres veces?... ¡Me podi mirar por favor!- dije molesto y dando la espalda a la mayoria de la gente para que no notaran nada. Él me miro, tenia las pupilas dilatadas, los ojos extremadamente abiertos y los dedos con que sostenía la cerveza los movía como si no se diera cuenta.
-Fuimos a comprar cigarros y fumarnos unos pitos- respondió como si fuera un robot.
-¿Y también jalaron?- pregunte irónico.
-¿Que estay hablando?- dijo haciéndose el tonto, pero ni para eso se esforzó.
-¿Franco jalaste?- dije mientras los ojos se me llenaban de lagrimas. Pero las retuve.
-¿Como voy a jalar?.
-Franco no soy tonto... Mírate- lo mire desilusionado y me fui al baño dejándolo ahí con su cara extraña.
¿Porque hace eso? ¡Droga de mierda! Sé que mucha gente no nota la diferencia entre la marihuana y la cocaína. Pero la verdad es que si la hay, o por lo menos para mi si. Me molesto verlo así, con esos gestos feos y tratando de ocultarlo aunque fuera inútil. Respire profundo, me mire en el espejo del baño y me tranquilice. Salí con la idea de seguir pasándola bien a pesar de todo. Lo primero que hice fue buscar al Franco con la mirada, pero no lo encontré, tampoco estaba su primo Andy. Camine a la mesa donde se encontraba todo el alcohol, había de todo, vodka, pisco, gin, ron, whisky, cerveza, vino etc. Me decidí por el pisco, no bebía pisco desde esa primera vez junto a él. Borre el pensamiento de mi cabeza y camine hacia la Anto y el Jano para seguir bailando. No me di cuenta cuando los vasos de piscola se hacían nada en mis manos. Pero seguí bailando y bebiendo... ¿Y el Franco?, hasta su existencia se me olvido, se me olvido todo, se me apago todo...
-¡Oye!, ¡Oye!- dijo moviéndome bruscamente -¡Levántate!- ¿que onda?, ¿que pasa?. No entendía nada, no sabia donde estaba ni quien me despertaba, solo sabia que tenia un dolor de cabeza terrible y la boca totalmente seca. Abrí los ojos, era pieza donde duermo en la casa de ellos.
-¿Franco?.
-¡Levántate!- dijo enojado destapandome.
-¿Que onda?- pregunte mientas me levantaba, estaba vestido aun, me sentía pésimo.
-¡Ya apúrate no mas!- dijo saliendo de la pieza- salí detrás de él, se quedo en el living mientras yo caminaba con dificultad a la cocina por un vaso de agua, mire hacia su pieza ¿Y la Cati? -¡Oye ven pa' acá!- dijo subiendo el tono de voz- ¿porque esta tan enojado?.
-Voy a tomar agua... ¿Que te pasa?- dije casi para mis adentros. Pero no se demoro en llegar hasta mi.
-¡¿Pa' onde te fuiste anoche con ese weon?!- lo mire extrañado mientras bebía agua.
-¿Que?, ¿Con quien?.
-¡No te hagai el weon ya!- ¡¿Que?!.
-¡A ver, a ver , a ver!- dije poniéndome serio -¡Para! ¿Me podí decir que te pasa?, ¿De que estaí hablando Franco?.
-¡Yaaaaa!, ¿Me vai a decir que no te acordaí ahora?- su actitud era flaite, hablándome cada vez mas cerca, intimidandome. Lo mire sin entenderlo aun -¡Te fuiste como treinta minutos con ese weon!- me grito en la cara.
Me quede pasmado mirando su actitud... Y solo ahí se me vinieron algunas imágenes difusas de lo que no recordaba... El Jano conduciendo su auto a toda velocidad por una autopista y yo de copiloto adrenalínico por la situación. Pero eso es todo... trate de recordar mas, la Cati ebria mientras la llevaban a acostarse, la Anto impidiendo que me suba al auto con el Jano.
-¡¿Pa' onde fueron po?!... ¿Te acordaste ah?, ¿¡Que chucha hicieron?!- grito una vez mas. Mire su cara y recordé sus gestos que tanto me desagradaron de anoche.
-¡No paso nada!- dije controlándome.
-¡Yaaaaa! Seguro te voy a creer- dijo botandome el vaso de la mano. Cayo al suelo rompiéndose en mil pedazos.
-¡Franco que te pasa!... ¡Si alguien aquí debería estar enojado soy yo! ¿O creí que no me acuerdo que anoche jalaste?.
-¡Haaa de eso si te acordai po!.
-¡Sipo, de eso me acuerdo!... ¿A donde estabaí cuando me subí a ese auto?... Jalando po- esta vez lo intimidaba yo.
-¿Y voh donde andabaí?...¿Chupandosela al weon?- esta vez ambos nos gritábamos tratando de intimidarnos. Él con su actitud flaite y yo... Yo tratando de imitarlo a él.
-¡Sipo, sipo!- respondí picado -¡Se la chupe en su auto!- cuando dije esto me miro con el odio vivo en sus ojos, pero seguí -¡Se la chupe como te la chupo a voh...!
Fue tan rápido que no me di cuenta cuando estaba en el suelo. Caí chocando con el refrigerador provocando que se cayera un frasco con utensilios de cocina encima mio. ¿Me había pegado un combo? lleve mi mano derecha a mi mejilla izquierda. La mejilla me ardía pero aun no sentía dolor. ¿Me pego? las lagrimas comenzaron a caer sin poder retenerlas. Lo mire... Abrió la puerta del patio con una sola patada, golpeo la muralla, pateo los juguetes de la Javi y cuando no pudo mas se sentó en el borde el viejo sillón y comenzó a llorar. <Andate, ¡Andate y déjalo solo> Grito mi subconsciente. ¿Pero como me hace esto?. <¡Levantate!> volvió a gritar. Hice caso pero caí nuevamente al enterrarme un pedazo de vidrio en la palma de mi mano. Volví a levantarme con mas cuidado, camine por el pasillo lentamente tratando de quitarme el vidrio.
-¿Viste lo que me hací hacer?- dijo desde el patio <¡Entra al baño, enciérrate!.>
Lo hice, me senté en el WC y me quite el vidrio. No me dolió. Me sumergí en lo recién ocurrido mientras él de afuera pedía que le abriera la puerta, hasta que comenzó a vibrar algo en mi bolsillo, era mi celular. Lo saque, era una llamada de la Anto.
-¿Borja?.
-Si- respondí no se con que tono. No me esforcé por ocultar nada.
-¿Borja donde estay?... Tenemos que hablar weon- comencé a sollozar -¿Borja que te pasa?- no sabia que decir, que responder -¿Borja weon que te pasa? háblame.
-Estoy en la casa de la Cati, ¿Donde estay tú?- respondí apenas.
-Estoy donde mi hermana todavía. Quería saber donde estabai pa' ir a verte... Tenemos que hablar weon. ¿Voy pa' alla?.
-¿Andan en el auto?.
-Sipo, ¿te voy a ver?.
-Ven a buscarme porfa Anto- dije explotando en llanto.
-Puta weon... Ya espérame, estoy allá en diez minutos.
Diez malditos minutos... ¿Como hago ahora para enfrentarlo?. Me pare y me mire en el espejo. Mi mejilla izquierda estaba hinchada, pero no como esperaba que estuviera. ¿Que hago ahora?, ¿Que voy a decir en mi casa?. <Esto no es amor>. Si... que difícil convencerme de eso ahora con este espiral de sentimientos. Antes ya pase por esto, pero aun así no se que hacer. ¿Que viene ahora? ¿Culparme a mi, su arrepentimiento, sus lagrimas?.
No, no, no... No puedo dejar pasar esto. no es sano. Aunque no me convenza a mi mismo. Abrí la puerta sin importarme golpearlo a él. Al hacerlo salí rápidamente a la pieza a buscar mis zapatillas, pero no alcance a llegar cuando Franco me agarro por detrás y me abrazo con fuerza pidiendo disculpas. Yo trate de zafarme moviéndome bruscamente y negándome a todas sus disculpas.
-¡No me volvaí a tocar!- dije apuntándolo con el dedo. Él se iba a acercar -¡No!- grite y cuando vi que se quedo parado lo deje y entre a la pieza. Me puse la zapatillas, busque mi banano entre la cama, tome mi chaqueta y salí de la pieza.
-¡Borjita por favor no te vayai!... Perdóname, perdóname- de un solo tiron me solte. Abrí la puerta y salí al patio delantero. Quise abrir la puerta de la reja pero estaba cerrada.
-Abre la reja por favor- dije indiferente.
-No te vayai por favor- pidió arrepentido una vez mas.
-¡Abre la reja por favor Franco!.
-No... No te vaí a ir.
-¡No me voy a quedar aquí...!- respondí acercándome a él y empujándolo -¡Después de esto!.
-¡Pegame, pegame!- dijo tomándome de las manos y llevándolas a su cara.
-¡Suéltame ridículo!... ¡Franco va a venir la Anto a buscarme así que abre la reja por la mierda!- note en su mirada como le dolió que lo haya tratado así.
Me miro unos segundos y entro a la casa a buscar las llaves. Lo único que quería era salir de esa casa y no volver mas, dejarlo para siempre aun que no quisiera. Porque esa era la verdad, no quería dejarlo, pero debía hacerlo.
Cuando volvió con la llaves era un zombi, alguien sin vida. Metió la llave en la cerradura y comenzaron a caerle unas lagrimas. Quise abrazarlo pero no lo hice y apenas abrió salí rápidamente dejándolo ahí arrepentido. Camine hasta la esquina para encontrarme con la Anto en caso de que entrara por aquí, justo iba llegando y vienen entrando al pasaje. Pararon el auto y se bajo mi amiga caminando preocupada hacia mi.
-¡¿Borja que te paso?!- negué con la cabeza porque si hablaba rompería en llanto. Me miro como si supiera todo y me llevo hasta el auto. Me senté atrás con la Anahi que estaba distraída con sus juguetes nuevos. Andres sin decir nada echo a andar el auto mientras la Anto se voltio para preguntar -¿Vamos a tu casa?.
-No... llévame a tu depa Anto porfa.
-Bueno- dijo con toda comprensión.
-¿Me puedo quedar con ustedes hoy?- pregunte con temor a que dijeran que no.
-Obvio po pavo.
Me sentí aliviado con la respuesta. Pero cuando pasamos por afuera de la casa del Franco se me quito ¿Como era posible llegar a esto?. Trate de llorar en silencio pero estaba en un auto con tres personas mas. Se acabo todo y tenia miedo de eso, no quería que fuera así. A lo mejor tenia que suceder esto para que se acabara, porque era la única forma... Pero lo cierto era que algo en mi se había quebrado y era definitivo... Continuara.